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LAS EDADES DEL AMOR
En los años de la Belle époque, a principios del siglo XX, el lujo de los jardines y salones barrocos se desbordaba y embargaba por dentro a la propia gente de París. Colette, una de las primeras escritoras desinhibidas europeas, autora de la novela en la que se basa la película, supo captar con todos sus matices el lujo de los sentimientos humanos, los amores y desamores, el deseo, el sexo, las dudas y la indiferencia.
El argumento es sencillo, un grupo de amigas maduras, ex prostitutas de clase alta, viven cómodamente de sus cuantiosos ahorros alejadas ya de su escandalosa vida pasada. Nadie podría sospechar que en una de ellas, Léa, iba a surgir el verdadero amor en los últimos años de su vida y además por el joven hijo de una de sus amigas al que ella desde niño llamaba Chéri, demostrando que a pesar de haber entregado tanto amor (el sexo también es amor) y de estar en el último tramo de la vida, se puede amar como adolescentes.
Chéri es un muchacho guapo, con un punto de cinismo y poco comunicativo irradiando un halo de misterio que lo hace aún más atractivo para ella. Su relación con Léa va a durar seis años pero en la pantalla no dura ni un minuto porque lo que le interesa mostrar a Stephen Frears (también director de Amistades peligrosas -1988- con la misma actriz: Michelle Pfeiffer) es lo que ocurre cuando la madre del muchacho decide arreglar su matrimonio con la hija rica de otra de sus amigas ex prostitutas. A ambos prometidos sólo los une el ser hijos de madres que no pudieron ocuparse de ellos en su infancia debido a su trabajo, son como huérfanos, dicen, pero eso no es suficiente para que nazca el amor entre ellos.
En Léa aparecen toda clase de dudas y celos por la nueva situación. Resulta un poco incoherente que la película se salte los seis años de vida en común porque no sabemos cómo se desarrollaron y debemos suponer que fueron muy felices. Sin embargo Chéri no parece haber madurado después de la feliz convivencia y sigue siendo el niño de doce años que Léa conocía. Su amor por Léa es una mezcla de amor sexual y filial por una madre que nunca tuvo.
Por el contrario Léa cree vivir un auténtico amor tardío y le resulta muy duro separarse de Chéri ante el compromiso de éste con la joven Edmée. Toda la problemática del amor se expone sin dramatismo, con un alto grado de racionalidad y hasta con cierta sorprendente frialdad.
La cinta ha sido coproducida por Reino Unido, Francia y Alemania. Para los que nos gustan las películas en versión original es una lástima que haya sido rodada en inglés, el francés era lo propio para una historia sentimental que se desarrolla entre París y Biarritz escrita por una autora como Colette.
La película ha sido presentada con el clásico tópico en el que una cortesana lleva a su hijo donde una amiga para que "lo convierta en un hombre" y durante tan singulares "clases" surge el amor. Nada más lejos de la realidad. Las reseñas y sinopsis han repetido este error que no tiene nada que ver con el argumento de la película. Sin duda alguna el enfoque de marketing tiene más morbo que lo que realmente sucede en la pantalla que no es otra cosa que un complicado amor entre dos personas de diferentes edades. Nada más, que es mucho.
El narrador, que al empezar la película parece que se dispone a leernos la novela entera de Colette, es totalmente prescindible. Ésta es tal vez una de las pocas películas en las que no importa llegar cinco minutos tarde.
CHÉRI TÍTULO ORIGINAL Chéri
AÑO 2009
DURACIÓN 100 min.
PAÍS GB, Francia, Alemania
DIRECTOR Stephen Frears
GUIÓN Christopher Hampton (basado en la novela de Colette)
MÚSICA Alexandre Desplat
FOTOGRAFÍA Darius Khondji
REPARTO Michelle Pfeiffer, Kathy Bates, Rupert Friend, Felicity Jones, Frances Tomelty, Tom Burke, Hubert Tellegen, Joe Sheridans, Toby Kebbell, Iben Hjele
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PAGINA ACTUALIZADA EL 18/12/2009